Algunas especies de roedores están perfectamente adaptadas al medio y son capaces de colonizar infraestructuras urbanas. Estos roedores son un riesgo para la salud pública, ya que son responsables de la transmisión de diversas enfermedades al ser humano, algunas muy graves.
En el diagnóstico de situación de estos casos, nuestro objetivo es determinar la existencia de infestación de roedores así como la vulnerabilidad de la instalación al acceso de roedores.

La gestión integral del riesgo asociado a roedores comprende un estudio previo mediante un análisis exhaustivo de las condiciones estructurales e higiénicas del local y sus alrededores, a tenor de cuyos resultados se diseña un plan de actuación específico, ideal para cada caso.
Este diagnóstico previo lo llevamos a cabo a través de inspecciones visuales, así como con trampas de monitorización, que nos permiten descubrir la presencia de roedores, así como el origen de la plaga, lugares donde la actuación debe intensificarse.
La aparición de ratones y otros roedores en edificios públicos, en centros de trabajo, restaurantes, hoteles, en la industria alimentaria, etc., supone un auténtico peligro para la salud pública, ya que actúan como vectores de microorganismos patógenos que transmiten enfermedades a los seres humanos y a los animales, además de ser causa de alergias.

Los roedores pueden transmitirnos más de 70 enfermedades de distinta gravedad, algunas de ellas mortales. Lejos de disminuir, la frecuencia de su contagio está aumentando en todo el mundo y, a medida que se conocen mejor las patologías que contagian, crece el conocimiento del número de enfermedades asociadas a ellas.